Efectivos pertenecientes a la Sección “Villa Olivari”, dependiente del Escuadrón 47 “Ituzaingó”, se encontraban llevando a cabo Actividades de Control sobre la Ruta NacionalNº12, en cercanías al acceso a la localidad cercana a Ituzaingó.
La madrugada del viernes 2 de febrero personal de la Gendarmeria Nacional detuvo la marcha de un transporte de cargas generales que provenía de la ciudad de Córdoba y tenía como destino final la ciudad de Bernardo de Irigoyen, al norte de la provincia de Misiones. Producto del control documentológico, se constataron inconsistencias entre el remito y la carga declarada, consistente en 36 toneladas de metales que comprendían cobre, bronce y aluminio.
Tras consultas a la AFIP-DGA, se pudo corroborar que quienes se encontraban especificados como remitente y destinatario en la documentación exhibida no poseían capacidad operativa ni económica la actividad comercial declarada.
Según el parte oficial, el destino declarado resulta sospechoso, en razón que la ciudad Misionera carece de industrias que procesen este tipo de mercadería y, teniendo en cuentasu proximidad con Brasil, se presume que la intención de la maniobra era transportar el material metálico hacia el país vecino a través de pasos no habilitados, configurándose una posible tentativa de contrabando.
Desde la fuerza se manifestó que: “La exportación de estos materialesse encuentra prohibida, según lo establecido por el Decreto 70/2023, que restringe el tránsito de productos de interés estratégico para el desarrollo de la industria siderúrgica Argentina. De la maniobra Intervino el Juzgado Federal de Corrientes, quien dispuso el secuestro preventivo de la carga, la cual fue tasada por la Administración Federal de Ingresos Públicos en un valor de $ 164.113.859.